El rugby de la capital santafesina atraviesa un durísimo momento, a causa de la muerte del joven deportista Jerónimo Fernández Bobbio, de 18 años, jugador del Club de Rugby Ateneo Inmaculada (CRAI).
Su deceso se produjo tras una complicación, en el marco de una cirugía a la que fue sometido en un hospital de Rosario.
Jerónimo había sufrido una lesión en la clavícula y el hombro durante un encuentro disputado en Rafaela, que requirió una intervención quirúrgica.
Sus padres decidieron trasladarlo a un hospital privado de Rosario para que el joven sea tratado por uno de los especialistas en hombro más reconocidos de la región.
Sin embargo, el procedimiento quirúrgico sufrió una complicación con importante pérdida de sangre. Los médicos lograron reanimarlo y quedó internado en terapia intensiva, con pronóstico reservado, producto del corte de una arteria.
En las últimas horas, se había puesto en marcha una campaña de donación de sangre que fue replicada por cientos de personas en redes sociales. El deceso del rugbier se produjo este martes, pasado el mediodía.
El fallecimiento de Jerónimo generó una profunda conmoción en el mundo del rugby, especialmente entre quienes compartieron con él su camino como deportista.
Desde distintos clubes y referentes del deporte local se difundieron mensajes de dolor por la irreparable pérdida y de acompañamiento a su familia.
