La campaña: el equipo terminó 9° en su grupo con 19 puntos en 16 encuentros producto de 5 triunfos, 4 empates y 7 derrotas. Anotó 12 goles y recibió 15. Maroni fue el único futbolista que disputó todos los partidos. Uno menos jugaron Banega y Silvetti mientras que Navas, Herrera y Montero estuvieron en cancha 14 veces cada uno. Luciano Herrera con 3 tantos fue el goleador del equipo. Silvetti y Lollo hicieron 2.

La figura: Keylor Navas fue, por lejos, el mejor de Newell's. El portero no solo estuvo a la altura de lo que se esperaba de una figura rutilante como él, sino que hasta superó las expectativas. Siempre mostró seguridad y tuvo tareas superlativas en varios encuentros (Estudiantes, Belgrano o Tigre por ejemplo).

Keylor Navas y Éver Banega en el último partido de la fase regular, que fue derrota ante Racing. (Fotobaires)

La revelación: Luciano Herrera. Sin haber brillado, el ex Defensa y Justicia, que llegó silbando bajito, se las ingenió para anotar goles importantes y mostrar un rendimiento por encima del esperado.

La decepción: el rendimiento de los centrodelanteros. Ni Cocoliso González (quien llegó con cierto cartel y entusiasmó de arranque) ni Juanchón García anotaron siquiera un gol en el campeonato. Fracaso rotundo de ambos.

El mejor partido: en la victoria por 2 a 0 ante Boca, la Lepra disputó claramente su mejor partido. Fue muy superior y le ganó con total autoridad al puntero del campeonato. También se pueden destacar los buenos triunfos ante Atlético en Tucumán y frente a Huracán en el Coloso.

El peor partido: la goleada 0-3 ante Banfield de la 2ª fecha fue lo más flojo del torneo para la Lepra. La producción en el clásico (con una nueva derrota) tampoco fue la esperada.

El gol: en un semestre en el que no hubo demasiados, puede destacarse el de Valentino Acuña ante Huracán como el mejor por la buena jugada y la posterior perfecta definición del pibe.

Balance: el torneo se puede dividir en dos: una nefasta primera parte con Mariano Soso a la cabeza, donde el equipo perdió 5 partidos sobre 6 (incluyendo el clásico) y otra con Fabbiani en la que solo cayó en 2 encuentros de 10 (11 si se tiene en cuenta la Copa Argentina). Igualmente, y más allá de la levantada final y la expectativa de un mejor segundo semestre, la sensación vuelve a ser de frustración porque pasó otro torneo sin pelear y con derrota en el derby.