El último sábado por la tarde, lo que debía ser una jornada de alegría terminó en una pesadilla para Lautaro, un adolescente de 15 años que fue a la cancha de Rosario Central a ver a su equipo ante Estudiantes, por los octavos del final del torneo Apertura, y terminó internado de urgencia tras recibir un fuerte golpe en la cabeza.
El hecho ocurrió en el ingreso al estadio Gigante de Arroyito, durante la previa del partido. Según los primeros testimonios, Lautaro fue alcanzado por un proyectil —posiblemente una baldosa— en medio de un tumulto en una de las puertas de acceso.

Luis, el padre del joven, habló con Telenoche Rosario (El Tres) desde su casa en zona norte. Con la voz todavía quebrada por el impacto emocional, relató: “Se encuentra bien, pero para nosotros fue algo muy fuerte. Estaba en una fiesta y terminó internado, casi pierde la vida.”
Todo fue confuso en un primer momento. Algunos testigos pensaron que se había tratado de un golpe de la policía o de una pedrada durante corridas. Un amigo de Lautaro fue quien primero dijo que había recibido un “baldosazo” mientras la gente se agolpaba para entrar al estadio. “Se armó un embudo, empezaron a empujar, y calculo que esa baldosa era para la policía, pero le pegó a mi hijo”, explicó Luis.
Pese al fuerte impacto, Lautaro ingresó y aguantó el partido entero en la tribuna, aunque según sus amigos “no estaba como siempre”. Al volver a su casa, pidió un analgésico y su madre, preocupada por su habla confusa, pensó en un principio que podía haber consumido alguna sustancia. Pronto, el chico comenzó a descompensarse.
“Un amigo contó que le habían pegado en la cabeza. Entonces lo llevamos de urgencia al hospital Carrasco, ya estaba convulsionando. De ahí lo derivaron al Heca. Cuando me dijeron que corría riesgo de vida y que había que operarlo de urgencia, fue desesperante”, relató su padre.

La tomografía reveló un hematoma cerebral de consideración. Lautaro fue intervenido y, por fortuna, la cirugía fue exitosa. Hoy se encuentra lúcido y en recuperación. “Me preguntó cómo salió el partido”, contó Luis, conmovido.
Por el momento, el joven deberá mantenerse alejado de las canchas por tiempo indeterminado. Su padre pidió que se tome conciencia sobre lo que ocurre en los estadios: “Que la gente sepa lo que pasa cuando se entra a una cancha. Por un tiempo largo, calculo que Lautaro no va a regresar".