Los distintos gremios agrupados en la Confederación General del Trabajo (CGT) se movilizan este miércoles por el centro de la ciudad de Buenos Aires por el Día de los Trabajadores con la participación de las dos CTA y organizaciones de la Unión de Trabajadores de la Economía Popular (Utep).

La marcha se desarrolla con la consigna “El trabajo es sagrado” con un mensaje contra el ajuste del gobierno nacional y un homenaje al papa Francisco recientemente fallecido.

La concentración comenzó cerca de las 14 en las inmediaciones de 9 de julio y avenida Independencia. Las columnas se movilizaban hasta la avenida Paseo Colón para finalizar en el Monumento Canto al Trabajo.

El inicio de la movilización no estuvo exento de tensión ya que el dispositivo de seguridad desplegado por el Ministerio de Seguridad, a cargo de Patricia Bullrich, bloqueó el paso y puso en marcha el protocolo antiprotestas

La convocatoria es muy buena y refleja el hartazgo de la gente”, afirmó Héctor Daer, uno de los secretarios generales de la CGT.

En diálogo con medios presentes, denunció el congelamiento de paritarias y el descontrol de precios. “No puede haber un plan económico que hunda los salarios mientras libera los mercados”, remarcó.

"No puede haber libertad de precios y paritarias pisadas", denunció Daer y añadió que con el gobierno nacional no tienen diálogo.  “No se está negociando nada. No hay ni siquiera diálogo”, aseveró.

Marcha de jubilados

También este miércoles marchaban en Buenos Aires, como lo hacen cada semana, las organizaciones de jubilados frente al Congreso nacional.

En este caso, se dispuso un operativo de seguridad a cargo de Gendarmería y la Policía Federal, en cumplimiento del protocolo antipiquetes.

Documento de la CGT

En el marco de la movilización de este miércoles, en la previa del 1º de mayo, la CGT difundió un documento para expresar la preocupación “ante un Gobierno Nacional que no atiende reclamos, no escucha y no dialoga, a la par que implementa un grave ajuste, cuyo costo lo están pagando las y los trabajadores activos y pasivos con el deterioro de sus ingresos”.

“Paralelamente, en contraste, el sector financiero capitaliza ventajas y multiplica obscenamente sus ganancias", dice el texto de la central de trabajadores.

"Las trabajadoras y los trabajadores conmemoramos este 1° de mayo nuestro día a lo largo y ancho de todo el mundo. Este constituye siempre una oportunidad para reafirmar nuestros derechos y compromiso solidario, sin embargo, hoy nos encuentra preocupados y alertas por al situación social, económica y laboral que estamos atravesando", añade el documento cegetista.

En otro tramo, la central sindical advierte que "una perspectiva estrictamente monetaria de la gestión pública, acrecienta día a día la deuda social, debilita el federalismo desfinanciando a las provincias y deteriorando aún más las economías regionales". Es más, destaca que las "metas fiscales que pierden de vista el rostro humano de esas decisiones, degradan la calidad de vida de nuestros compatriotas y posterga un horizonte de democracia moderna y de desarrollo nacional".

Los gremialistas advierten que el desmantelamiento del Estado que implementa el gobierno de Javier Milei a partir del cierre o debilitamiento de "sus organismos de control, de sus empresas y el abandono de la obra pública, los despidos masivos más el desfinanciamiento de la educación y la salud pública, agravan el escenario de desempleo, desigualdad y el riesgo social".

En ese sentido la CGT afirma que "los dólares que ingresan al país son fundamentalmente de deuda, lo que agrava la hipoteca del pueblo argentino, su futuro y la soberanía de sus decisiones" y agregan que provoca "alarma la sostenida caída en los niveles de consumo durante varios meses consecutivos, el incremento de los índices de inflación y el consiguiente agravamiento de los niveles obscenos de pobreza y marginalidad".

Por último, el documento de la CGT reclama la implementación de "paritarias libres, homologación de todos los Convenios Colectivos de Trabajo, actualización y aumento de emergencia para todas las jubilaciones, políticas activas para la generación de empleo y poner fin a la represión salvaje e injustificada de la protesta, que viola leyes y acuerdos institucionales".

En esa línea la central obrera "rechaza la privatización del Banco Nación —y el cierre de sus sucursales—, de Aerolíneas Argentinas y de todas las empresas y organismos públicos amenazados. Reclamamos una política exterior convergente con los intereses nacionales, la defensa irrestricta de nuestro territorio y riquezas naturales, reivindicando la autoridad argentina sobre las Islas Malvinas".