A cuatro décadas de su conformación, Graffiti, una de las bandas icónicas de la escena rosarina del rock de los 80, regresa a los escenarios con dos de sus miembros fundadores sen escena: Eduardo Carbi y Ariel Pozzo. El concierto es este viernes a las 21, en el teatro El Círculo (Laprida y Mendoza).
Formado a mediados de 1985, el debut discográfico del grupo Graffiti fue Exhibición condicionada, placa editada en 1987. A ese álbum le siguió Sin respirar, en 1988. registro que le abrió paso a los distintos proyectos solistas de los integrantes. Con el nuevo milenio, la banda se reunió en 2009 para un recital en Plataforma Lavardén, cuya grabación fue lanzada en formato DVD. En 2015, cortaron el silencio discográfico con la publicación de Inédito.

La lista continuó con Graffiti 3 (2020), Infinito (2021) y Gladstone Road (2022). El último trabajo de la banda es Oíd mortales, concebido entre 2023/24, “un álbum introspectivo y profundo que refleja la cruda realidad del día a día”. Asimismo, en 2024, editaron Graffiti vivo y Ecos, con un bonus de versiones remix inéditas.
Luego de encuentros esporádicos, el grupo se reúne este viernes para celebrar 40 años. La banda, que se mantiene activa a pesar de tener a sus integrantes repartidos entre Londres, Buenos Aires y Rosario, se ensambla para verse, cara a cara con la siguiente formación: Eduardo Carbi (voz y percusión), Ariel Pozzo (guitarras, bajos, teclados y coros), Luis Bergonzi y Ricardo Vilaseca (teclados), Marcelo Gallego y Claudio Falzone (bajo) y Gul Rodríguez (batería).
Las entradas para el concierto están a la venta a través del sistema ticketek.com.ar y en la boletería del teatro.
El diálogo con Rosario3, Eduardo Carbí adelantó detalles del show de Graffiti y del último disco del grupo.
—¿Qué significa para vos estos esta celebración?
—"40 años de música” es un aniversario importante, es un aniversario en el que vamos a honrar cuatro décadas de haber compartido tantas cosas y fundamentalmente, haber compartido música con la gente de la ciudad. Entonces, para nosotros es muy importante porque hemos hecho esto a lo largo de todos estos años por pasión y por amor a la música. Creo que, de alguna manera, el evento refleja ese paso a través del tiempo en donde también se denota la evolución en lo compositivo, por supuesto con sus espacios en el medio. Los primeros discos grabados Exhibición condicionada y Sin respirar tenían una temática especifica acorde a lo que pasaba en ese momento en nuestras vidas y en la Argentina en general. El tercer álbum, Inédito, ya con la disolución de CBS, se termina no editando a través del sello, pero lo editamos nosotros más tarde, con temas como “Lejos del alma” y “Males de personas confundidas”. Ahí ya se muestra un despegue desde las canciones originales del 87, con temas más elaborados y con letras más comprometidas.

En la entrevista, Carbí explicó que “después de eso, se da un impasse en el que me radico en Inglaterra, en Londres, y Ariel (Pozzo) sigue con sus proyectos junto a Miguel Mateos. Eso no fue una disolución, simplemente cada uno siguió su camino. En 2008 nos reunimos para un concierto en la Sala Lavardén y, después, en el teatro Astengo, en 2011. Tiempo después, empezamos a trabajar sobre un nuevo material. En el 2020 nos agarra la pandemia y empezamos a componer, gracias a la posibilidad de poder hacerlo a la distancia. Junto con Ariel compusimos más de 50 canciones, casi cuatro álbumes: Graffiti 3, Glaston Road, Oíd Mortales e Infinito. Fue un período muy prolífico pese a las dificultades. Había pasado el tiempo necesario y habíamos madurado para poder escribir desde otro lugar canciones que tengan otro tipo de contenido, otro tipo de sustancia y de arreglos, pero siempre tratando de conservar la esencia de la banda. No quisimos movernos hacia el lado de lo que convenía cantar o hacer porque era lo que se estaba escuchando, sino que nos propusimos seguir siendo nosotros mismos.
—¿Cómo está planteado el concierto del viernes?
—Nosotros nunca tenemos el mismo setlist, lo vamos cambiando y lo vamos modificando, precisamente, porque se ha ido agregando a lo largo del tiempo material. Ha sido bastante complicado tratar de armar una lista de temas para un concierto porque son muchos temas que, verdaderamente, nos gusta tocar y que esperan aquellos que nos siguen. Entonces, va a ser un concierto con sorpresas, con invitados; un concierto en donde vamos a hacer ese paneo a través de la historia de la banda, desde los inicios hasta la fecha y en donde aquellos que descubren a Graffiti por primera vez van a poder escuchar una banda que todavía permanece vigente a través del material que compusimos. Todo esto en el contexto de una apuesta de iluminación y de sonido verdaderamente increíble, con la posibilidad de tocar en un teatro como El Círculo. Es verdaderamente un orgullo para cualquier artista. Creo que es la gala perfecta en el lugar ideal para homenajear el material y la trayectoria de Graffiti.
Para Carbí, “a veces se cree que estos homenajes tienen que ver con la banda y yo creo que en realidad es al revés. tiene más que ver con la gente, con todos aquellos que nos siguieron desde que eran chicos, desde que eran jóvenes o adolescentes y que nos iban a ver a los shows del anfiteatro, a los shows del Monumento a la Bandera. Creo que es un homenaje para todos ellos. Estoy orgulloso de ser parte de este movimiento que nos ha acompañado durante tanto tiempo”.