Este martes al mediodía se confirmó la muerte de una de las nietas de Cris Morena, hija de Tomás Yankelevich. Ocurrió mientras un bote vela ocupado por una mujer y cinco niñas fue embestido por una barcaza en las aguas de la Bahía de Biscayne, cerca de Hibiscus Island y Miami Beach, lo que derivó en la muerte de dos niñas y dejó a otras dos en estado crítico.

Un video de vigilancia, difundido por NBC News, captó el momento en que la embarcación comercial impactó contra el velero y todos los ocupantes cayeron al agua, lo que dio origen a un amplio operativo de rescate. 

La tragedia ocasionó la muerte de dos niñas, una de ellas, Mila, hija de Tomás Yankelevich, hijo de Cris Morena y Gustavo Yankelevich y hermano de Romina Yan. Las víctimas tenían 7 años y otra de 13 años, según detallaron oficiales consultados por el medio estadounidense.

Al momento del fatal accidente, Mila participaba de un campamento náutico de la Miami Youth Sailing Foundation, un área del Miami Yacht Club donde buscan apoyar tanto a los competidores serios como a navegantes recreativos, desde su infancia y en todos los niveles de habilidad.

Otros dos menores, una niña de 8 años y una de 11, permanecen en estado crítico en centros hospitalarios, mientras que una adolescente de 12 años y la mujer de 19 lograron sobrevivir.

Al respecto, el capitán Frank Florio, comandante del Sector Miami de la Guardia Costera, expresó: “Acompañamos en el sentimiento a las familias de los fallecidos y a todos los afectados por esta tragedia. Incidentes como este dejan una huella duradera en nuestra comunidad marítima y refuerzan la importancia de aprender de cada pérdida”.

Investigadores de la Comisión de Conservación de Pesca y Vida Silvestre de Florida y la Guardia Costera iniciaron los peritajes para esclarecer las circunstancias de la colisión y determinar las posibles responsabilidades. Las autoridades enfatizaron la prioridad de la seguridad y anunciaron que buscarán implementar medidas adicionales conforme avancen las pesquisas.

Enzo Pifer Eddy, de 9 años, describió el impacto del barco contra el barco y dijo: "Todos los niños salieron volando".

Otra niña de 8 años, que pidió no ser identificada, dijo haber escuchado a una niña gritar pidiendo ayuda debajo de la grúa de la barcaza. "Fue muy triste y aterrador", dijo la niña.

El velero donde viajaba Mila fue embestido de lleno por una barcaza, y la niña, al igual que otros compañeros, salieron despedidos hacia el mar.

Sobre el desarrollo de los hechos, el suboficial Nicholas Strasburg de la Guardia Costera detalló en declaraciones a CNN que la embarcación de vela quedó debajo de la barcaza tras la colisión.

El Miami Yacht Club remarcó mediante un comunicado la naturaleza todavía incierta del evento: “Por el momento, los detalles continúan surgiendo y estamos activamente recabando toda la información disponible. Nuestra prioridad es la seguridad y el bienestar de todos los involucrados, y estamos colaborando estrechamente con las autoridades y organizaciones pertinentes para comprender completamente la situación”.

Al momento del arribo de las autoridades estadounidenses, el velero permanecía sumergido bajo la barcaza y el Sector Miami mantuvo una zona de seguridad de 250 yardas (228 metros, aproximadamente), según revelaron funcionarios de la Guardia Costera en un comunicado de prensa.